Por segundo día consecutivo el Ministerio Público mediante la Fiscalía de Derechos Humanos, continuó con la sindicación de hechos contra 6 de 14 militares a quienes se les atribuye su participación en 88 eventos relacionados con las masacres realizadas entre los años 1981 a 1988 durante el conflicto armado interno en Guatemala en el departamento de Alta Verapaz.
Los sindicados en este caso son: Manuel Benedicto Lucas, Edgar Rolando Hernández Méndez, Ismael Segura Abularach, Pablo Roberto Saucedo Mérida, César Augusto Ruiz Morales, Juan Ovalle Salazar, José Antonio Vásquez, Gustavo Alonzo Rosales García, Raúl Dehesa Oliva, Carlos Augusto Garavito Morán, Carlos Humberto Rodríguez López, Byron Humberto Barrientos Díaz, Luis Alberto Paredes Nájera, César Augusto Cabrera Mejía.
Durante la audiencia la fiscalía imputó a Paredes Nájera 122 hechos. Entre los indicios presentados por el Ministerio Público se encuentran declaraciones testimoniales, resultados de exhumaciones, ubicación de agresores, datos generales e identificación de las víctimas, informes genéticos y defunciones.
Por otra parte, a Gustavo Alonso Rosales García se le señala de 14 hechos donde figuran la desaparición de Felipe Caal López, así como dar seguimiento a los planes militares y ordenar la ejecución de personas subversivas, respaldándose en su cargo como comandante de la zona militar número 21.
A Alonso Rosales se le sindican los delitos contra los deberes de humanidad, por un crimen de guerra y lesa humanidad contra población no combatiente y desaparición forzada, porque familiares lo buscaron y jamás apareció.
Mientras que a Raúl Dehesa Oliva se le atribuye la desaparición de Carlos Enrique Chávez, sustentada en la declaración testimonial de la hermana de la víctima, perfil genético, genograma del grupo familiar, hallazgos de piezas dentales para la identificación de cadáver, ropa, certificados de nacimiento y defunción, entre otros.
También figura Carlos Augusto Garavito Morán a quien también se le acusa de por lo menos ocho desapariciones.
José Antonio Vásquez García quien según las pesquisas siguió lineamientos militares ya que cualquier detenido lo declaraba enemigo interno.
Luis Alberto Paredes Nájera se le acusa de 122 desapariciones.
Primer día de audiencia
El primer día de audiencia de primera declaración, la Fiscal de Derechos Humanos, Hilda Pineda, presentó la imputaron de los hechos a Manuel Benedicto Lucas García, ex Jefe del Estado Mayor General del Ejército 1981-1982; así como los ex oficiales de la zona Militar No.21: Ismael Segura Abularach, Byron Huberto Barrientos Díaz, Carlos Humberto Rodríguez López, Pablo Roberto Saucedo Mérida, Juan Ovalle Salazar, César Augusto Ruiz Morales.
Investigaciones
Las investigaciones de este caso iniciaron en febrero de 2012, luego de una sentencia en el caso conocido como Plan de Sánchez, en donde fueron condenadas ocho personas por un total de 7 mil 710 años de prisión. Durante el proceso hubo testigos quienes indicaron que, dentro de la Zona Militar número 21 con sede en Cobán, Alta Verapaz, existía un cementerio clandestino donde habría unas 558 víctimas.
En febrero de 2012, el Ministerio Público inicia las diligencias para realizar excavaciones en el antiguo recinto militar, actualmente se conoce como Comando Regional de Entrenamiento de Operaciones de Paz (CREOMPAZ), mismas que duraron 3 años.
Luego de las excavaciones se localizaron 558 osamentas humanas, se ha establecido que 90 corresponden a menores de edad; 443 adultos, todavía por definir entre hombres y mujeres; adultos de la tercera edad; y 22 sin determinar en este momento. De esas 558 osamentas humanas; 97 han sido identificadas por ADN.
Guatemala, 11 de enero de 2016.